viernes, 25 de septiembre de 2015

Mi abuela, casi un siglo de vida en Mamolar

A las buenas nuevas!! Ya estoy otra vez por aquí dando guerra. Ha pasado mucho tiempo pero he decidido que no puedo abandonar otra de las cosas que me gusta hacer por falta de tiempo o por cansancio.

En el hotel estamos a tope, no paro ya que últimamente soy "la multiusos" tan pronto te hago una traducción de un menú, como te preparo un curso de cocina para promocionar restaurantes y vender servicios de alimentos y bebidas, como te hago un informe de ventas y lo defiendo en una reunión, como busco cuentas nuevas para traer mas negocio de empresa al hotel, como atiendo quejas de hispanohablantes, como asisto a un evento y doy a conocer Meliá Dubai,... en fin, que nadie es indispensable en su puesto de trabajo pero lo que esta claro es que yo estoy saturada!!

No le voy a brindar mas tiempo al hotel, esta vez el articulo va a ir dedicado a mi abuela. Creo que soy de las pocas afortunadas que aun puede disfrutar de su abuela y no solo eso sino que disfruto de mi abuela casi centenaria!!!

Para los que no la conozcáis os voy a hablar un poco de ella, se llama Victoria como yo, mira que a mi me gusta poco el nombre pero para mi abuela me gusta. De momento he decidido cedérselo y que ella siga siendo Victoria y a mi me sigan llamando Vicky.

Mi abuela nació en Burgos y vivió gran parte de su vida en Mamolar, supongo que os preguntareis dónde está Mamolar así que os diré que esta muy muy cerquita de Santo Domingo de Silos donde los monjes cantan gregoriano. Menos mal que están los monjes cerca, porque sino no sé como iba a explicar donde está el pueblo de mi abuela!

Aunque a mi me parezca increíble plantearme mi vida en un pueblo como Mamolar, mi abuela no puede vivir sin su pueblo, en su pueblo revive. Los que conocéis a mi abuela me entenderéis perfectamente y para los que no, os voy a explicar un poco su vida para que podáis entender cómo un pueblo te alarga la vida.

Por circunstancias de la vida mi abuela se quedó viuda muy joven (mi madre tenía 14 años cuando murió su padre) y con 5 hijos a su cargo. Sus hijos se fueron a buscar la vida a grandes ciudades y mi abuela se quedaba en Mamolar hasta que llegaba el invierno burgalés. Cuando empezaban a llegar los fríos polares, recogíamos sus cosas y nos la llevábamos a pasar los inviernos con nosotros. Al terminar la primavera mi abuela ya estaba desesperada de la ciudad así que no veía la hora de irse a su pueblo para ello, había que convencer a los hijos: que si me puedo valer sola, que si no hace tanto frío, ... de repente Mamolar se convertía en el Caribe con tal de volver al pueblo.

Al principio los hijos cedían y mi abuela se pasaba en su pueblo la mayor parte del año pero la edad no pasa en vano y poco a poco esas largas temporadas que mi abuela pasaba en Mamolar se redujeron a pasar sólo los meses de Junio, Julio y Agosto. A pesar de que sabemos que el pueblo es la mejor medicina para mi abuela, nos es imposible pasar más tiempo durante el verano con ella en el pueblo. Y os preguntareis que qué tiene el pueblo que le gusta tanto a mi abuela? pues bien, mi abuela desde que se levanta hasta que se acuesta vive en las calles de su pueblo. Se levanta, asea, desayuna y sale a la calle a ver pasar a la gente o simplemente de charleta con alguno de nosotros. Otras veces se coge su revista Lecturas u Hola y empezamos a cotillear. A la hora de comer siempre dice que no tiene hambre pero luego come. Como buena española se echa una buena siesta hasta la hora de las cartas, que que es eso de las cartas?? Mi abuela juega con otras vecinas a las cartas durante toda la tarde, el juego al que juegan se llama brisca y no os creáis que juegan por pasar el rato, se juegan dinero!!! 5 céntimos a la que mas partidas a ganado en toda la tarde!!!! Para no olvidarse se las partidas que gana cada una se meten judías en el bolsillo del vestido (mi abuela no permite que le compremos vestidos sin bolsillos delanteros porque sino no puede meter las judías y el pañuelo) y al final de la tarde las sacan todas las judías y ven quien tiene más. Por cierto, para mi todas las mujeres que se sientan allí con mi abuela para jugar a las cartas son ganadoras aunque no lo sean de judías y en partidas ganadas, son ganadoras en buenas personas y en tener mas paciencia que el Santo Job, como os podréis imaginar la agilidad en las manos no es la misma la de una persona de 20 años que de casi 100!



Os pensareis que mi abuela con sus 99 años (el 17 de Diciembre de este año hará los 100) no cuenta bien los tantos de las cartas, pues la lleváis clara porque no se equivoca ni en uno y si te ve utilizar los dedos para contar te dice que eso es de tontos!

Ahora ya os he contado cuáles son algunos de los secretos de que mi abuela siga estando bien pero por si las moscas os hago un resumen: la vitalidad que tiene ella misma, las partidas de cartas, su familia y su pueblo.

Con la edad que tiene mi abuela, cada vez la familia va más y más en aumento así que a día de hoy tiene 5 hijos, 8 nietos y 3 bisnietos. Confiemos en que siga viviendo más años para que podamos seguir disfrutando de ella.

Este verano, el pueblo le hizo un homenaje a mi abuela y les doy las gracias a todos por haber tenido ese detalle con ella. Cuando llegué a Mamolar para pasar unos días con ella, lo primero que me dijo fue que le habían cantado y regalado un ramo de flores. Gracias a todos por hacer que mi abuela sea un poco más feliz durante ese día.

Abuela, TE QUEREMOS MUCHO!!!!